martes, 27 de noviembre de 2012

cómete mis miedos


Siempre se me ha dado mal hablar de mí misma, prefiero esconderme en terceras personas. En alguna pianista olvidada con las manos llenas de grietas y el corazón con taquicardias.. Nunca supe cómo sacar la fuerza interior, siempre se consume entre mis lágrimas. Soy capaz de llegar al cielo deseándolo con todas mis fuerzas, pero nunca se prever la caída. Y siempre caigo, siempre. Siempre toca olvidar los lugares donde dejé el corazón. Donde sentí más que nunca. Soy como aquella niña que no hace más que desear algún caramelo que perdió en alguna esquina maldita. Y no le vale otro, ese era el de mejor color. O lo es. Mi maleta está llena de sinsabores, mi alma está cosida con hilo de todos los colores porque cada tres días la remiendo. Y me pierdo entre la gente, paso desapercibida entre el vaivén de las mañanas, de las tardes, de las noches. Camino por las calles sin palabras, sin nadie que me espere al final del camino, con una luz lejana que me alumbra de madrugada. El café últimamente se amarga, y los relojes siempre marcan la misma hora: 00:00. Dale cuerda a mi reloj. Cóseme sonrisas en la mirada, rompe la soledad de mis manos. Tírala al suelo, písala hasta que deje de gritarme a cada minuto. En mi isla no existe nadie más que tú. Sigue buscándome. Algún día a las 9 de la mañana nos encontraremos, radiantes, sedientos.

Suéñame, soy sólo lo que tú haces que sea. Si dejas de soñarme… me convierto en aire. Todos mis sentidos te sienten sin sentir, el corazón late sin latir… anda ven, y cómete mis miedos.

domingo, 25 de noviembre de 2012

medios años y cosas que pasan en mi vida

 
No sé cómo explicártelo. Simplemente es que no encuentro mejor lugar para vivir que en el quinto lunar de tu espalda.

sábado, 24 de noviembre de 2012

de vez en cuando, dedico unos minutos a pensar en ti.

Ay, es que es tan fácil olvidarte amor. Te diluyes entre los pensamientos cotidianos y los romances fugaces, todas las historias de amor que armo con otros hombres,  hombres que me encuentro en librerías o que cogen mi mismo autobús. Y es que en esos momentos ellos parecen tan reales y tú tan imaginario...Pero no te preocupes, yo te quiero mucho, cuando me acuerdo de ti.