domingo, 14 de agosto de 2011

El placer de las pequeñas cosas


¿Quién no disfruta con la sensación de meterse en una cama recién hecha? ¿Quién no se siente bien con ropa interior nueva? ¿Quién no es feliz cuando en la radio sin esperarlo suena tu canción favorita? ¿Quién no disfruta poniendo la última pieza del puzzle? ¿Quién no se alegra cuando en un cambio nos dan por error unas monedas de más? ¿Quién no se divierte derribando botellas de cristal con piedras? ¿Quién no se siente el mejor cantante del mundo cuando sabe que nadie le escucha? ¿Quién está de mal humor cuando el médico te permite saltarte la dieta y comerte alguna golosina? ¿Quién se enfada cuando a media noche una llamada de la persona que más quieres te despierta para decirte algo bonito? ¿Quién no se alegra de ver que al despertarse en el reloj quedan un par de horas más antes de madrugar? ¿Quién se enfada si el jefe no viene a trabajar? ¿Quién no se distrae con una revista de cotilleos en la consulta de un médico? ¿Quién no se relaja en su rincón favorito sabiendo que nadie sabe donde está? ¿Quién no se para ante el escaparate de eso que tanto deseas y que no sabes si tendrás pero que con solo verlo ya te contentas?